Ultimas Noticias | Jueves 18 de Octubre de 2007 | |
La Carlota por enésima vezÉsta debe ser conservada y potenciada como parque, como zona verde, equipada convenientemente para el disfrute de los caraqueños, dentro de un proyecto amplio y generoso que le de razón concreta a la política de rescate de los grandes valores urbanos. Ya hemos repetido por diferentes vías lo que nos parece recoge la opinión absolutamente mayoritaria, los argumentos que nos asisten en exigir cancelar el malhadado proyecto del Ministerio de la Vivienda. No los vamos a repetir una vez más. Simplemente queremos ratificar que en Caracas hay otros espacios donde se puede aumentar la densidad, y construir inclusive con proyectos ya elaborados desde hace tiempo. Si se quieren viviendas, se pueden construir en otras partes. Lo que sí queremos es insistir en reflexionar sobre un aspecto que subyace en todo este asunto. Por cual razón y en atención a cuales misteriosos mecanismos burocráticos, en el Ministerio que ahora pretende construir viviendas en la franja sur, no se escuchan las opiniones, no sólo las de las personas más competentes, sino las del público en general y hasta la del propio Presidente de la República, quien en su oportunidad solicitó un proyecto que preveía la conformación en La Carlota de una gran parque conectado con el Parque del Este. ¿Qué forma es ésta de manejar la política revolucionaria? Tanta adulación y tanto decir que sí mi comandante, para que en esta ocasión se pase por encima hasta de la opinión del máximo líder. ¡Que extraño! Realmente ésta parece una maniobra por sorpresa, una acción que tiene en la manga otros fines, tal vez no muy santos. Nos perdonan, camaradas, pero es que en una situación como ésta, las suspicacias suben a flote. Y es que ésta no es la primera vez que decisiones que se toman por el mismo Presidente Chávez, de forma razonada y con sólido sentido político, se desmoronan paulatinamente, se achican y se pierden en los vericuetos y en los pliegues de la burocracia de segundo nivel y en los intereses de los oportunistas. Por este camino vamos mal: no se dialoga, no se escucha, y luz verde a la improvisación. No, paremos ya los trabajos que se está iniciando precipitadamente en La Carlota. Escuchen el clamor popular y al Presidente de la República. Y hagamos de La Carlota el gran parque de la Revolución Bolivariana.
Adjudicaciones justas y equitativasEn 1999 y 2000 el Conavi, para cumplir con la Ley de Vivienda, elaboró un Sistema para las adjudicaciones de las nuevas viviendas construidas por el Estado. El Inavi mandaba al Conavi las listas de solicitantes con sus datos.Pero el Sistema era tan balurdo que todos los solicitantes calificaban y como el número de viviendas no era suficiente había que recurrir al prehistórico método de los sorteos, con su secuela de mal entendidos y mala aplicación. Como el Sistema no funcionó el vacío legal se extendió por varios años durante los cuales las adjudicaciones se hicieron más o menos a dedo. En la Gaceta Oficial del 27-08-07 el Ministerio de Vivienda publicó un reglamento con el nuevo sistema de adjudicación. Pero esas normas son todavía peores que las del viejo Conavi. El criterio determinante es que las familias con ingresos de menos de Bs. 1,2 millones mensuales y los jefes de familia sin pareja que ganen menos de Bs. 1,8 millones califican ¿Por qué la diferencia de niveles? De todos modos una norma así no sirve para nada y es una aberración. No sirve para nada porque todos los solicitantes van a calificar y no van a cumplir su función de establecer prioridades. Es una aberración porque ni siquiera considera el indicador de los ingresos. Una familia de 5 personas con Bs. 1.200.000 de ingresos tiene un per cápita de Bs. 240.000 y califica. Una familia de 6 personas con un ingreso de Bs. 1.320.000 de ingresos no califica, aunque sea más pobre ya que sólo tiene 220.000 per cápita. Además no considera ninguna otra variable social, económica o cultural, lo cual resulta de una ignorancia lamentable. El problema es que cada nuevo ministro impone en su ministerio a su grupo de trabajo, que le es leal, y raspa al grupo de trabajo anterior sin miramiento alguno, aunque sean conocedores y eficaces y revolucionarios comprobados. Reorganizar el territorioLa forma como se distribuyen municipios y estados en el territorio nacional, tiene una larga historia de cambios. Aparecieron nuevos y desaparecieron otros, se superpusieron, se contradijeron, entraron en conflicto y lograron acomodo. Lo han hecho durante toda la vida institucional y política de Venezuela. No hay ninguna razón para que consideremos el mapa del país, con su distribución actual, como algo sagrado, intocable y nos escandalicemos frente a la posible reorganización como si se tratara de un atentado a la tradición. Todo lo contrario, si el país va hacia una reconsideración racional de su economía, por lo tanto de las fuentes de sus recursos económicos, agrícolas e industriales, de la nueva ubicación de las nuevas ciudades y de sus relaciones productivas, de los medios de intercambio y de mercados, dentro de una planificación a mediano y largo plazo de carácter cada vez más socialista, lo lógico es que también se reorganicen los municipios o los estados o las formas institucionales que vayan a sustituirlos. Gran cuidado deberá haber en la racionalidad y la seriedad de los estudios que acompañen los cambios. ¿Qué habrá que sacudir intereses afincados en el territorio, en la pequeña política ligada a los caciques locales, etc.? Sin duda, pero si queremos cambiar de verdad al país para avanzar hacia su nueva modernización, no hay forma de comerse la torta y de dejarla intacta.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario